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El yoga durante el embarazo se ha convertido en una práctica cada vez más popular, y no es difícil entender por qué. Además de proporcionar ejercicio físico suave, adecuado al momento y fortalecimiento del cuerpo, el yoga ofrece una serie de beneficios únicos que pueden mejorar significativamente la experiencia del embarazo y preparar a la madre para el parto y la maternidad.

1) Alivia las molestias físicas
Reduce los síntomas y molestias habituales que pueden aparecer como dolor de espalda, ciática, retención de líquidos, mala circulación, cansancio, fatiga. Con posturas específicas, técnicas de respiración y ejercicios de estiramiento, alivian la tensión muscular, mejoran la circulación y promueve la relajación general del cuerpo.

2) Fomenta la conciencia corporal
Practicar yoga durante el embarazo puede ayudar a las mujeres a conectarse más profundamente con sus cuerpos en constante cambio. Las futuras mamás aprenden a escuchar y respetar las señales de su cuerpo, adaptar sus ritmos a la nueva situación y a lo que el bebe necesita en cada trimestre. Es un tiempo, en que se dedican a sentir y escuchar al bebe, generando ya sentimientos y vínculos entre ambos, mucho antes de nacer.

3) Reduce el estrés y la ansiedad
Está comprobado que practicar yoga disminuye los niveles de cortisol y adrenalina, hormonas que están en sangre cuando hay estrés y aumenta las endorfinas, que reduce la ansiedad y aportan una sensación de bienestar y calma. Se ha visto, que esta presencia de hormonas de estrés es una de las causas por las que bebes a término, pueden nacer con problemas de bajo peso

4) Te prepara para el parto
Las clases de yoga para embarazadas son una oportunidad única para practicar técnicas de respiración y relajación que son fundamentales durante el parto. A través de la práctica regular, pueden aprender a mantener la calma y afrontar los desafíos del parto con mayor confianza y serenidad. Además, ciertas posturas de yoga, como las de apertura de cadera, ayudan a preparar el cuerpo para el parto al fortalecer los músculos y mejorar la flexibilidad. Practicar yoga durante el embarazo puede ser una herramienta valiosa para empoderar a las mujeres durante el parto.

5) Promueve el bienestar mental
El embarazo es un momento de grandes cambios tanto físicos como emocionales para la madre, y el yoga ofrece un espacio seguro para explorar estos cambios y cultivar un estado de mindfulness. A través de la práctica de yoga, es el momento para estar en el presente, disfrutar del «aquí y el ahora», cultivar la aceptación y el autocuidado, y desarrollar una conexión más profunda con ellas mismas y con sus bebés en gestación. Es lo que llamamos tener un Embarazo Consciente.

La razón para practicar el embarazo consciente es que es beneficioso tanto para la madre como para el bebé: El Hospital Clínic de Barcelona llevó a cabo una investigación liderada por el Dr. Andres Martin (especializado en mindfulness) en la que participaron 1200 embarazadas de entre 18-55 años y que tenía como objetivo observar los cambios en ellas al aplicar cambios en su vida (siguiendo las directrices del mindfulness).El resultado fue una reducción significativa del riesgo del bebé de nacer prematuro o con muy bajo peso, y muchas menos complicaciones durante la gestación que sí vivieron algunas madres que no aplicaron ninguna técnica de meditación o mindfulness (atención plena)

En resumen, por la combinación de beneficios físicos y emocionales, las clases de yoga específico para embarazadas son una herramienta de incalculable valor para las futuras mamás que desean disfrutar de un embarazo más saludable y consciente. ¡Te animamos a probarlo!

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